Capitulo veintiuno de:

Un pensionista autocaravanista confinado en casa.

Ayer terminemos la primera parte de la salida de Semana Santa 2019 por los pueblos blancos de Andalucía, y estábamos en la ciudad de Ronda ya camino hacia otro destino.

Este nuevo destino fue un sitio mítico donde los haya, Setenil de las Bodegas, que sitio o pueblo más curioso, pero antes diremos que no fue fácil poder aparcar nuestra Camper. Nosotros tenemos una costumbre yo creo que muy sana, cuando llegamos a un sitio para visitarlo primero hacemos una visita sin bajar del vehículo, nosotros le llamamos visita cultural. Una vez tomamos posición de los sitios posibles para aparcar y deducimos donde está el centro neurálgico miramos de aparcar la AC.

En el pueblo no pudimos aparcar, así que una vez aparquemos al cruce antes de llegar al pueblo, a un km aproximadamente, nos calcemos las zapatillas y andar. La entrada no es lo más espectacular, aun que lo es, pero lo autentico está un poco más al centro donde la roca cubre completamente la calle y las casas o tiendas/bares están dentro de la misma roca, algunas de ellas decoradas muy al entorno, precioso o más bien espectacular.

El resto del pueblo está muy empinado y tampoco es lo que los viajeros visitamos. Por la tarde emprendimos rumbo hacia Zahara de la Sierra, aun que tengo que decir que de un destino a otro en el trayecto tienes que hacer un alto, ya que por vistas de la Sierra o por algún lugar que quieres echarle un vistazo el trayecto es un paseo.

Este pueblo tiene un lago artificial fruto de una presa del Rio Guadalete, a sus pies y el centro del pueblo está debajo del castillo que está en la cima, cuando estas visitándolo es como muchos de los pueblos de la Sierra pero cuando llegas o bien te vas tienes que parar en un mirador y te das la vuelta y parece que estas contemplando un cuadro, que preciosidad de lugar y que paz, también el día acompañaba mucho, hacia un  sol muy limpio, y entre el azul del cielo y el del agua sentado en aquel mirador pedias que se detuviera el tiempo, pero no era posible, la vida sigue y la ruta también.

Así que cogimos ruta dirección a Grazalema. En este lugar nos paso como anteriormente en Setenil, nos costó mucho poder aparcar la AC así que después de nuestra vuelta de reconocimiento aparquemos antes de entrar al pueblo, en un lugar más para las AC, así que nos volvimos a calzar las bambas y andar hacia arriba, porqué los pueblos siempre tienes que andar hacia arriba? Este día era domingo y cuando lleguemos en la plaza parecía una fiesta, que ambiente, que vida tan alegre, y nos sentemos en una mesa fuera de la terraza enfrente de la iglesia y nos tomemos unas cañas, aun que sin alcohol, por la gota.

En la subida al pueblo nos paremos a llenar la botella de agua en la fuente que hay pero lleguemos arriba con set, muy importante mencionar el agua de las fuentes de toda estas zonas es fresquísima, buenísima, y personalmente las pruebo todas las aguas que encuentro en fuentes, aun que alguna vez he tenido algún que otro retortijón.  

En muchos de los pueblos tenemos áreas con servicios pero hay una que tengo que resaltar y es la de Algodonales. Un área grandiosa y con todos los servicios incluido la luz, coordenadas, N 36.87387, W 5.40987. El pueblo está un poco apartado pero para visitarlo nosotros lo hicimos antes de márchanos, cogimos la AC y aparquemos arriba al lado de la calle principal.

Hoy termino esta segunda parte, mañana continuaremos Sierra.

Jordi Coch. 11-04-2020.